Cada pequeña flor es un reflejo del profundo cuidado de Dios por cada parte de la creación.
Últimas imágenes
Dios nos invita a mirar más allá de nosotros mismos para ver las oportunidades que se nos presentan.
«Mis ovejas reconocen mi voz, y yo las conozco y ellas me siguen». John 10:27 (DHH)
«Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestra mente alcance sabiduría». Salmo 90:12 (DHH)
Mi alma canta alabanzas por la belleza abundante de las plantas y los cielos y las montañas.
Con asombro vemos brotar nueva vida, que nos recuerda el poder de Dios para renovarnos.
«Cuando en mí la angustia iba en aumento, tu consuelo llenaba mi alma de alegría». Salmo 94:19 (NVI)
Experimentamos el don del amor de Dios a través del cuidado y la compasión de quienes nos rodean.
Cada uno de nosotros tiene dones y habilidades que nos equipan de manera única para participar en el reino de Dios.
Damos gracias por nuestros mayores, que nos guían y cobijan, mostrándonos el camino de Cristo.
«Por eso te recomiendo que avives la llama del don de Dios que recibiste cuando te impuse las manos». 2ª de Timoteo 1:6 (NVI)