El viaje hacia la resurrección

«Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá,
y todo el que pierda su vida por causa de mí y del
evangelio, la salvará». — Marcos 8:35 (RVC)

Les saludo en el nombre de Jesús en la época de transitar
por el período de Cuaresma y Pascua.
Al dedicar un tiempo a diario a este número de El Aposento
Alto, viajaremos con Jesús hacia la cruz, la tumba, la tumba
vacía y su aparición a los discípulos en el aposento alto. En este
tiempo, al leer las Escrituras, nos encontraremos con el triunfo,
la derrota, la vida, la muerte, la desesperación, la incertidumbre,
el consuelo: toda una gama de emociones y vivencias.
Los próximos dos meses, cuando cada día dediquen un
tiempo a estar con Dios mediante las páginas de El Aposento
Alto, descubrirán una variedad de experiencias a través de los
testimonios de nuestros autores. Habrá historias de triunfos, de
derrotas y de incertidumbre, tiempos de consuelo y tiempos de
desolación. Todas las cosas que Jesús, y quienes le rodeaban,
vivieron en los días previos y posteriores a la Pascua.
Claro que la Pascua señala la clave fundamental para
nosotros. Si no fuese por la Pascua y las promesas que trae,
incluso nuestros triunfos, nuestros éxitos estarían vacíos y enfrentar
las dificultades parecería imposible. Al unirnos a esta
comunidad de oración y reflexión, reunimos nuestros relatos
y nos alentamos unos a otros, a la vez que nos acercamos cada
vez más a Dios a la luz de la resurrección. Oramos por que
usted se sienta alentado a través de la lectura de estas páginas.
En El Aposento Alto transitamos este
tiempo con dedicación renovada para
sembrar el evangelio en el mundo que nos
rodea mediante las páginas de esta pequeña
guía de meditaciones. Gracias a ustedes
estimados lectores. Agradecemos de gran
manera sus oraciones y su apoyo.

—Pete Velander
Director Ejecutivo,
División Editorial de The Upper Room