Sr. Carl Bromley
(Texas, EE. UU.)
Pero al sentir el viento fuerte, tuvo miedo y comenzó a hundirse. Entonces gritó: —¡Señor, sálvame! - Mateo 14:30 (NVI)
Por un tiempo luché contra la ansiedad. La situación se había vuelto tan grave que me resultaba difícil ir de compras en el supermercado. Por lo general, simplemente apretaba los dientes y seguía adelante, pero a veces el miedo se volvía abrumador. Parecía una tontería temer algo tan sencillo, especialmente...
Compartir en redes sociales