Sr. Robert Sorozan
(Pensilvania, EE. UU.)
El salmista oró: «Pero alégrense todos los que en ti confían; den voces de júbilo para siempre, porque tú los defiendes; en ti se regocijen los que aman tu nombre». - Salmo 5:11 (RVR)
Una lluvia interminable cayó en una pequeña área del condado donde vivo y volcó una cantidad increíble de agua en poco tiempo. Vi como cerraban caminos y se efectuaban rescates. La calle en frente del restaurante donde habíamos comido un rato antes ese mismo día se convirtió en un río...
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