Sr. George T. Wilkerson
(Carolina del Norte, EE. UU.)
Cuando llegaron al lugar llamado la Calavera, lo crucificaron allí […] —Padre—dijo Jesús—, perdónalos, porque no saben lo que hacen. - Lucas 23:33-34 (NVI)
Al echar atrás el auto en la entrada, Misty, mi novia, y yo conversábamos con nuestros amigos ubicados en el asiento trasero. Al escuchar un chirriar metálico y sentir el automóvil sacudirse, reinó un silencio repentino. Había dado contra una roca al lado de la entrada puesta allí para desanimar...
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