Carta de Navidad

14 de diciembre, 2020 por Jorge Berrios

«También José, que era descendiente del rey David, subió de Nazaret, ciudad de Galilea, a Judea. Fue a Belén, la Ciudad de David,  para inscribirse junto con María su esposa. Ella se encontraba encinta».  — Lucas 2: 4 y 5 (NVI)  

Amados hermanos/as:  

Cuando leemos el relato del nacimiento de Jesús, nos encontramos con los versículos arriba citados que nos hablan del recorrido de José y María desde Nazaret a Belén. Podemos imaginar que fue un viaje con muchos desafíos y obstáculos que vencer. El relato bíblico no ofrece mucho detalle  de la travesía pero debió haber sido todo un reto significativo el realizar el viaje pero con un final glorioso: el nacimiento de nuestro Señor Jesucristo.  

El recorrido de este año 2020 también ha sido un viaje muy desafiante. La pandemia del Covid-19 que nos ha afectado durante la mayor parte del año ha sido un desafío que nos ha tocado de cerca a cada uno de nosotros y nosotras. Al enfrentar este desafío se ha alterado nuestra rutina diaria, nuestra forma de trabajar, nuestra comunicación, nuestra forma de congregarnos y nuestra forma de relacionarnos unos con otros entre otros ajustes.  

Pero hay algo que la pandemia no puede alterar y es nuestra fe, nuestra convicción y certeza en un Dios que se encarnó y tomó forma humana a través del nacimiento de Jesús. Nacimiento que representa la Navidad y tenía que cumplirse para poder gozar de la salvación y la esperanza. Esa es la esperanza que nos impulsa a continuar  en el camino que estamos experimentando. Esperamos que cada meditación diaria de El Aposento Alto haya sido y siga siendo una fuente de inspiración y aliento en el caminar que nos ha tocado enfrentar. Damos gracias a Dios por el apoyo fiel que cada uno de ustedes le han brindado al ministerio de El Aposento Alto aun en medio de una travesía ardua.  Oramos por cada uno de ustedes especialmente por quienes han sido tocados físicamente por la pandemia y por las familias que han perdido a seres queridos.  

Que nuestro  Emanuel nos continúe bendiciendo y fortaleciendo en el viaje y nos ayude a llegar a Belén para experimentar allí nuevamente el nacimiento de Jesús y recordar el verdadero significado de la Navidad.  Que el niño nacido en Belén, nos acompañe cada día del nuevo año que se acerca.

 

En Cristo,  

Jorge L. Berríos                                                                       Theresa Santillán                                                                                                

Editor Gerente                                                                        Editora Asistente

El Aposento Alto                                                                     El Aposento Alto

 


1 Comentario
Iniciar sesión to leave a comment