Sr. Jim Good (Ohio, EE. UU.)
¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! El mundo no nos conoce, precisamente porque no lo conoció a él. - 1ª de Juan 3:1 (NVI)
Una mañana húmeda y nevada, mi hermana y yo revisamos la cocina buscando bolsas de plástico usadas, de esas que contienen el pan. Tras el reciente fallecimiento de nuestros padres, no teníamos con qué comprar zapatos buenos. Así que, usábamos las bolsas plásticas del pan para cubrir las medias y...
Hoy me veré a mí mismo como Dios me considera: digno, santo y ungido.
por quienes no tienen calzado adecuado
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